Sexto especial

Realmente creí que el especial anterior había quedado horrible >< pero ustedes son demasiado amor y por eso las quiero ♥. Ah! me he decidido a terminar los especiales primero porque la historia normal va a tener mucho que ver con lo que ha sucedido en el pasado y no quiero que se me confundan. Muchas gracias por leer. Dedicado a mi omma a Chio y a Nyu ♥ .

E special 6.

Youngwoong nunca había experimentado sentimientos posesivos porque al fin y al cabo nunca había encontrado un algo que codiciar.

Mucho menos un alguien.

Que fuera capaz de atraer su atención hasta ese punto.

Sin embargo...como bien dice el dicho nunca digas nunca. Y un día de pronto un tal Jung Yunho entró en su vida para demostrarle que ese dicho no era pura patraña.

La vida es un mar de sorpresas.

Y al ser infinito pensó que lo había visto todo ya.

Afortunadamente, volvió a equivocarse.

Su mente aún llena de tanta ira solo tenía una idea clara...le arrancaría la cabeza a Siwon. Y luego...se cargaría a Yunho hasta hacerlo llorar.

¡Oh sí! Y se tomaría todo el tiempo del mundo para ejecutar ambas.

Así que sin postergarlo más. Embistió a un asustado Siwon y sin mucho esfuerzo lo llevó fuera del refugio. Iba a masacrarlo...y no quería hacerlo enfrente de Yunho. Por mucha ilusión que la idea le hiciera. Los humanos eran tan sensibles.

Siwon le clavó las garras en la espalda cuando su espalda colisionó contra un árbol partiéndolo en dos.

Le era sencillo bloquear sus ataques porque podía leer perfectamente su aterrorizada mente.

Derecha, izquierda, arriba o abajo.

Y Siwon lo sabía.

Había sido demasiado tonto.

E iba a pagar con su vida su error.

Youngwoong no podría dejarle libre. No ahora que sabía de la existencia de Yunho.

Y era muy consciente de que si Lamia se enteraba de todo esto...Yunho iba a morir. Muy probablemente delante de sus narices. Y la sola idea le dio miedo.

Porque por el momento...no quería renunciar a él.

Le cruzó la cara de un puño, Siwon cayó medio moribundo al piso. Le había roto bastantes costillas. Y justo ahora, aplastando su muslo izquierdo con la suela de sus zapatos estaba a punto de hacer trizas el fémur.

El eco del hueso haciéndose pedazos le puso los pelos de punta a un Yunho que acababa de salir del refugio después de escuchar tanto árbol caerse y haberse colocado sus ropas como sea.

Sabía que Youngwoong era fuerte...pero ese otro también era vampiro.

Así que con el corazón en las manos salió fuera. Dispuesto a hacer lo que fuera por ayudar a su Youngwoong.

Pero lo que vio le hizo convulsionarse.

Pues vio a un Siwon pendiendo de los brazos de su amado, a punto de perder la cabeza por la forma en que Youngwoong se la estaba sosteniendo.

Y cerró los ojos mientras se tapaba los oídos con ambas manos y gritaba, “¡No!”

Youngwoong volteó a verlo. Empapado de la sangre del otro vampiro con esos ojos fríos y asesinos que al humano le distribuyeron escalofríos por todo el cuerpo.

El vampiro suspiró, entonces. Le pegó un buen rodillazo en todo el estómago a ese otro que gruñía piedad mientras escupía sangre por la boca.

“Ve dentro,” le ordenó.

Yunho no se movió.

“Voy a arrancarle la cabeza, no vas a querer ver esto, ve dentro.”

“Pe-pe-pero”

“Yunho...”

“No tienes que...”

“Es él o somos nosotros...” gruñó el vampiro desviando la mirada.

Yunho sintió su cuerpo desfallecer ante ese nosotros.

Vale, debía admitir que era en extremo posesivo con Youngwoong... Y podía entender que su pareja también lo fuera. Por más que eso le jodiera. Pero sinceramente no entendía a Youngwoong.

Diciéndole cosas tan frías, tratándolo como un pedazo de carne.

Para después ¿protegerlo?

Ahora había un nosotros.

Una hora atrás había sido una nada.

¿Qué habría a la hora siguiente? ¿Por qué jugaba con él de esa forma?

Se había enamorado del vampiro.

Perdidamente, tendría que agregar.

La carne no le bastaba. Lo quería a él. A todo él. Y sabía que por sentirse así estaba muy jodido. Porque Youngwoong era poco más que un ser sin corazón.

Que si por esas cosas de la vida llegaba a enterarse de sus sentimientos probablemente decidiría acabar con su vida de una vez por todas en vez de cargar con ellos. Y morir en sus manos realmente no se le hacía una mala idea. Después de todo...mucho tiempo tampoco le quedaba.

Sin embargo...

Era un simple humano al fin y al cabo.

Y tener esperanzas era algo que no podía evitar. Soñar con un Youngwoong besando sus labios con algo más que solo deseo...con amor.

Lo peor de todo era que. No podía maldecir la hora en que se conocieron. Porque en los últimos meses se había sentido más vivo que en todo sus años de vida. Y todo ello se lo debía a Youngwoong.

“Promiscuo de mierda,” le dijo en un susurro mientras volvía a entrar en el refugio.

Youngwoong sonrió de lado.

“Bueno ¿en que estábamos? ¡Oh sí! Iba a arrancarte la cabeza”

“Puedes hacerlo Youngwoong...pero mi señor no es tonto, mi desaparición levantará sospechas.”

“Soy inteligente...le persuadiré.”

“Mi señor es más astuto de lo que crees.”

“Pues me encargaré de él.”

“Te conviene tenerme de tu lado. Puedo informarte de sus movimientos y persuadirle también.”

“¿Que te hace pensar que confiaría en ti?”

“No tienes que perder...Lamia no se atrevería a quitarte la vida a lo mucho castigaría tus actos. Claro, el humano no tendría tanta suerte. Pero es un humano después de todo... ¿acaso te importa?”

“Pasa...que me importa un poco”

La cara de Siwon se contrajo, se le acababan las cartas. Y como fuera así definitivamente perdería la cabeza esa tarde.

“Bueno con más razón todavía. Quizás mi señor mande mucho más guardias...te convendría que yo me apareciera le dijera que estas en un refugio en el norte tan solitario como siempre.”

“Siwon... ¿sabes que puedo leerte la mente, verdad?”

“Ahí tienes tu prueba. Cuando me escuches intentar faltar a nuestro trato...puedes ir por mí.”

“Podría hacerlo...pero no me quedo muy tranquilo. Tengo otra idea.”

“¿Cual?”

“Bueno, si en realidad estas siendo sincero conmigo no tendrías problemas con hacer un pacto de sangre ¿me equivoco?”

Siwon calló.

“De modo que...verteré mi ponzoña en ti y si faltas a nuestro trato...esta se convertirá en veneno.”

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Youngwoong entró en el refugio con una gran mueca de asco después de haber tenido que saborear la sangre de Siwon y encontró a Yunho sobre la cama, abrazando sus piernas.

Ahora que Siwon estaba fuera del plato, iniciaría la parte dos de su plan.

“Ni lo pienses,” le gritó Yunho cabreado cuando lo vio sonreír mientras se quitaba la capa, “límpiate al menos.”

“Que quisquilloso eres.”

“Sí lo soy...y si vas a querer algo de mí más te vale empezar a decirme quien es ese tal Lamia con el que me sacas los cuernos.”

“¿Qué?”

Yunho a veces podía ser muy extraño. Pero eso último realmente lo había descolocado.

“Como escuchaste...”

“Yunho...no te debo explicaciones de nada ni que fuéramos...”

“¡Exacto! No lo somos ¿verdad? Mientras has estado asesinado a tu amiguito he estado pensando ¿Por qué demonios sacas la cara por mí cuando te importo tan poco?”

Youngwoong calló esta vez.

Porque hago lo que se me viene en gana, no era una respuesta contundente.

“¿Vas a seguir con la mariconada?”

“Puedo irme si no quieres escucharme.”

El vampiro suspiró.

No podía amenazarlo de nuevo. Yunho era más complaciente cuando estaba feliz. Y él quería tenerlo de nuevo. Y ese cabeza dura tenía bastante dignidad a decir verdades.

“Ok, que quieres que te diga,” le dijo cansado

“¿Quién es Lamia?”

“Nuestro creador.”

¡ENCIMA EL TIPO ERA IMPORTANTE! El castaño maldijo por lo bajo antes de preguntarle “¿Creador?”

“El padre de todos, la máxima cúpula ya sabes...”

“Espera ¿padre? Pero si tú...”

“Hmp...”

“Mierda ¿es que son animales o qué?”

“Yunho...”

“¿Qué?”

“¿Ahora sí vamos a hacerlo?”

“Bastardo, promiscuo y encima incestuoso...deberías darme asco.”

“Debería...”

Odiaba que Youngwoong supiera manejarlo a su antojo. Lo odiaba con cada hueso de su cuerpo.

“Solo cierra el pico y quítate eso de una vez,” le dijo en un gruñido mientras se quitaba su propia vestimenta

“Vale,” acordó el vampiro sin perderse ningún detalle.

Se deshizo de sus ropas algo divertido. Había decidido que disfrutaría del humano hasta que la hora de su muerte natural acaeciese. Y después todo volvería a ser como antes. Podría disfrutar el manjar de su sangre como lo planeó desde un principio. Y seguiría su eterna vida ¿verdad?

Así que tratando de ignorar ese vacío que empezaba a formarse en su estómago, se inclinó sobre Yunho juntando sus labios.

Séptimo especial

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Bueno, espero haya gustado. Me voy a almorzar :DD